La Academia del Partal apoya la intervención de Antonio López en las puertas de la Catedral de Burgos

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Los cabildos catedralicios son los responsables de velar por la conservación y enriquecimiento de sus templos, como así ha sido a lo largo de la historia, en la que artistas, arquitectos y artífices de primera línea han aportado elementos de su propia época, por encargo de quienes regían en cada momento las sedes episcopales. Este proceso de acumulación histórica, presente en numerosos ejemplos del pasado reciente, es el que da valor al patrimonio y también el que define y justifica la manera de intervenir sobre él. Lo importante no es exclusivamente el valor artístico en sí mismo de las piezas que se insertan, sino la relación y el diálogo que establecen con el lugar en el que lo hacen..

Por este motivo, valoramos de forma positiva la iniciativa del cabildo de Burgos de incorporar un nuevo elemento artístico de marcado carácter contemporáneo y con un nuevo significado, que añade valor al edificio y que no altera su esencia. Los monumentos son organismos vivos y la intervención sobre ellos va más allá de la simple limpieza o del cuidado exclusivo de su materia, que es la que da soporte a cuestiones más importantes, como son la arquitectura en su máxima consistencia técnica, histórica y artística, y en la propia trascendencia de su implantación urbana y territorial. Con la sustitución de las tres puertas de su fachada occidental, además, creemos que la catedral mejora su proyección social aportando al entorno una obra para el disfrute de todos.

Todas las opiniones vertidas hasta el momento son respetables, pero se han basado en una información escasa y carente de detalle. Inciden de forma simultánea sobre aspectos como la necesidad, el costo, la iconografía e incluso sobre la propia obra de arte como hecho autónomo. Creemos que interesa, sin embargo, poner el foco en la cuestión que nos parece más relevante, que son los criterios de intervención sobre un monumento y el derecho de cada época a establecer con el pasado un diálogo creativo.

Marco Antonio Garcés Desmaison Presidente de la Academia del Partal

(*) La Academia del Partal (Asociación Libre de Profesionales de la Restauración Monumental) fue fundada en 1992 y está integrada por miembros de diversas disciplinas procedentes de todo el Estado que entienden la restauración monumental como la metodología interdisciplinaria que tiene por objeto la conservación del Patrimonio Arquitectónico, así como su revalorización, el disfrute colectivo y la trasmisión a las generaciones futuras en el mejor estado y grado de autenticidad posibles, sin alteración de su esencia fundamental.

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